BIOGRAFÍA

Posteriormente comenzó el curso de técnico deportivo en fútbol (nivel I) sin antes pasar por los banquillos porque creía conveniente seguir formándose para poder dar el paso. Esto sucedió en la temporada 14-15 justo al final donde cooperó con el cuerpo técnico comandado por Paco González en el Vélez CF en la Tercera División Española Grupo 9.

Tras terminar el curso y para las prácticas del Nivel I, en la temporada 15-16 trabajó en el CD El Palo, como segundo entrenador en el Juvenil Liga Nacional acompañando a Capa, que unos meses más tarde sería el analista táctico del primer equipo del Atlético de Madrid, también sería responsable de las redes sociales y carteles online del Juvenil. Esa misma temporada, Sebastián, realizó labores de trabajo como analista del primer equipo de Tello que competía en Tercera División Española Grupo 9. A su vez ayudó en la cantera Paleña como entrenador del Alevín.

Al término de la temporada quiso dar un paso más y se aventuró en solitario en la temporada 16-17 con tan sólo 25 años en un equipo sénior que tenía problemas en la 2° División Andaluza. Inició como Primer entrenador y Director técnico a su vez para planificar una plantilla de la cual solo había 3 jugadores de la anterior temporada. Conformó una buena plantilla con la que empezó de cero y realizaron una buena pre temporada; tras un inicio liguero con buen pie, fue relevado a segundo entrenador por la llegada de un entrenador más veterano. Por incongruencias con el Presidente dejó el cargo a mediados de temporada, al poco tiempo el equipo desapareció. A raíz de este hecho participo en la cantera del Vélez FC llevando el Cadete.

Esa temporada también lo compaginaba con labores de Scouting de jugadores para el AD Ceuta de la Tercera División Española Grupo 10.

La campaña 17-18 y cursando el técnico deportivo en fútbol (nivel II) presentó junto a su hermano y preparador físico un proyecto diferente. Y es que fundó el primer filial propio en toda la Historia del Vélez CF en su 95 aniversario. El proyecto consistía en ser él quien buscara patrocinadores, vendiese publicidad, organizará las cuentas del equipo, administrará la taquilla y pagos a los árbitros debido a que el club nunca quiso hacer filial por el peso económico que suponía y quitaría presupuesto al primer equipo, de esta manera y arrimando el hombro en ocasiones, el Vélez vio con buenos ojos el proyecto. A parte de esa parcela, en lo deportivo tocaba confeccionar una plantilla joven desde cero y ser el dueño del banquillo.

Para sorpresas de muchos el equipo fue viable, sostenible y con muchos jugadores que participaban a gran nivel tanto en entrenamientos como en partidos con el primer equipo en Tercera División. Quedaron en 6° a muy pocos puntos de los 4 primeros que daban el ascenso de categoría, ascenso que consiguieron tras rechazar la plaza dos equipos. Tras finalizar la temporada y el sobre esfuerzo en las labores no deportivas decidieron tanto él como su hermano emprender una aventura fuera de tierras Andaluzas, en la Capital del Fútbol, Madrid. Primero realizando en verano y de manera intensiva el curso de entrenador Nacional (UEFA -PRO) la máxima titulación la cual le acredita para entrenar cualquier equipo en cualquier categoría del mundo.

En la temporada 18-19 inicia su andadura como entrenador en Madrid, una aventura que le haría crecer como persona y como técnico. En el CDE Amistad de Alcorcón, club asociado a ADA Alcorcón, dónde comandó el filial y la parcela deportiva del fútbol formativo Femenino, entrenando al Alevín y al Infantil A y B, los cuales salieron campeón de su grupo y tercero de toda la comunidad de Madrid. No sólo aprovechó para entrenar, sino que aprovechó las múltiples ocasiones que le ofrecía la ciudad para seguir formándose en el ámbito deportivo, con cursos y congresos complementarios a su formación.

Su buena temporada no pasó desapercibida para los clubes de Madrid y firmó para la temporada 19-20 por el Atlético Club de Socios, club pionero en España del fútbol popular. Dicho equipo militaba en la Preferente Madrileña y tras su descenso confío para su recuperación deportiva en el Míster Malagueño.

Un buen inicio liguero fue seguido de irregularidades en la plantilla, una plantilla que se antojaba corta y de menos nivel para lo que la categoría requería; aún así siempre se fijó el objetivo de la permanencia, ya que sólo seguían 5 jugadores de la anterior temporada, menos plantilla y menos nivel que otros años. Tras problemas extradeportivos y una destitución inesperada pues tenía al equipo 5 puntos por encima del descenso, el 14 de Diciembre recibe una oferta para entrar en el fútbol profesional como segundo entrenador en Marruecos, junto a su ex compañero de Curso Saíd Zecri. El 18 de Diciembre ya ejercía en la ciudad de Al-Hucemas, en Botola 2 (la segunda División marroquí) en el equipo Chabab Rif Hoceima. Además se hizo responsable de crear un departamento de análisis táctico. El Objetivo del club era la salvación, un club habitual de la primera División y que se encontraba en la última posición y con problemas administrativos y federativos. Tras la crisis sanitaria por la pandemia mundial del Covid-19, puso punto y final en Mayo para ser repatriado a España en unas condiciones extremas y con muchas dificultades para salir de marruecos.

Junto al fútbol en toda España la incertidumbre fue a más con el paso de los meses en el verano 2020 y a la espera de nuevos retos... 

Se dio un proyecto en un gigante del futbol español, el Écija Balompié SAD. Un histórico club de la provincia de Sevilla, siendo el tercer club de toda la provincia por detrás de Sevilla C.F y Real Betis Balompié.

En la TEMPORADA 20/21 División de Honor, la 5º categoría en España, en el Grupo 1-A y con un proyecto difícil ya que el club pertenecía a la Tercera División española y por impagos y problemas extradeportivos, tras una temporada sin competir, descendió una categoría.

De la nada tenía que salir adelante el primer equipo junto a un sinfín de contratiempos, desde una reconstrucción de la plantilla empezando de cero, dificultades económicas para fichar, una pretemporada corta, desigualdad en el comienzo de liga por no poder competir a la misma vez que el resto de equipos a causa de las restricciones sanitarias con el cierre perimetral de Écija.

Con todo ello y contra todo pronóstico el equipo salió a competir, con una plantilla muy corta, joven e inexperta y casi toda la totalidad de la plantilla jugadores Astigitanos estrenando por primera vez categoría Senior. Sacando buenos resultados contra equipos que venían mucho más rodados y con mayor presupuesto, los jóvenes cogieron responsabilidades altas y suplían la inexperiencia con una gran predisposición para trabajar y entrenar, incluso en los días voluntarios.

Tras cinco jornadas de Liga y un sinfín de problemas extradeportivos, la directiva decide despedir al cuerpo técnico argumentando "malos" resultados en contra de la opinión de jugadores, aficionados y prensa. Finalmente salió a la luz unas discrepancias entre entrenador y una persona del club, que dinamitaron la salida del entrenador.